Durante los meses siguientes a la edición de Kivenkantaja (recuérdese que vamos por el año 2003) dieron varios conciertos, incluyendo el festival de Tuska en Helsinki el 11 de julio, y grabaron un nuevo videoclip, esta vez para una versión reducida (cinco minutos en lugar de diez, aproximadamente) de “Jumalten kaupunki”. En una entrevista de diciembre de 2002, Henri no parecía muy entusiasmado por la idea de hacer un vídeo: “Estaría bien, pero nuestras canciones no son precisamente cortas, y sería frustrante editarlas para dejarlas en unos 4-5 minutos, porque de ese modo pierden su significado musical, en mi opinión. Si de todos modos alguna vez hacemos uno, tendrá que tener una realización profesional y buen aspecto. Este tipo de banda tiene todos los elementos para hacer una chapuza de vídeo, ya que hay una línea muy delgada entre «pomposo y dramático» y «patético y risible». Si pudiera elegir, no sería una «historia» sino más bien una escena, o «suma» de historia más la canción. Y por supuesto incluiría bosques, castillos, caballos, espadas, batallas, fuego, y cosas como esas; nada de guitarras y demás. Ahora imagina lo fácil que sería convertir una idea buena y superpomposa en el montón de mierda más patético del mundo a lo Grave Digger o Rhapsody”. Pero al final lo hicieron, y de la manera que Henri quería: con guerreros y espadas. Mitja estudió Imagen y Sonido y había trabajado en un estudio de televisión; ese mismo estudio fue el que utilizaron para grabar este vídeo, y el director fue el propio Mitja. “Tuvimos ese estudio gratis durante un fin de semana porque Mitja había estudiado y trabajado allí anteriormente. Así que llamó a algunos de sus colegas para ayudarnos en la producción; nosotros preparamos el escenario y grabamos las escenas con dos cámaras caras. Además teníamos a los chavales esos locos por los vikingos y las batallas medievales representando luchas con espadas”, cuenta Marko. Esos chavales que menciona son de una asociación que se dedica a eso, a representar movidas medievales y de la Edad de Hierro, algunos de los cuales son antiguos amigos de Henri. El videoclip les quedó decente, pero posteriormente dijeron que no piensan hacer más, nunca. “Nos concentramos en hacer el ridículo de otras maneras. No necesitamos hacer vídeos para eso”, bromeaba Ville, en la misma entrevista en que Mitja comentaba: “Se suponía que iba a empezar con las palabras «Now, this is Spinal Tap!», pero Henri no estuvo de acuerdo”.
El 6 de septiembre de 2003 anunciaron que habían firmado un nuevo contrato con Spikefarm para otros dos discos. Lo primero que hicieron fue ponerse enseguida a preparar la reedición del Suden uni, ya que por fin habían conseguido que Plasmatica le cediera los derechos a Spikefarm. Ese otoño se lo mandaron a Mika Jussila para que lo remasterizara (más bien para que lo masterizara por primera vez; vid. capítulo 2.1), le diseñaron un libreto totalmente nuevo con la portada diferente (bastante más fea, en mi opinión; el dibujo es de Niklas Sundin, guitarrista de Dark Tranquillity y diseñador gráfico profesional) y traducciones de las letras, se hicieron unas foticos promocionales nuevas, recopilaron sus dos videoclips y cuatro canciones en directo de su actuación de Tuska 2003 en un DVD y el 8 de diciembre lo pusieron a la venta. Vi alguna crítica en la que el redactor se quejaba de que se reeditara un disco que tenía sólo dos años; obviamente, el que dijo eso no conocía la historieta de los problemas con Plasmatica. La verdad es que la mejora en la producción de las canciones es notable. Del festival de Tuska, las cuatro canciones incluidas son todas las que tocaron menos una; la que falta es “Raunioilla”, cuya calidad de sonido no consideraron suficiente para publicarla. (De todos modos, esa canción en concreto salió en un reportaje sobre el festival, emitido por el canal finlandés YLE; si alguno de vosotros tiene una versión en calidad decente de ese material, ¡que haga el favor de ponerse en contacto conmigo!) Además, al CD le añadieron una canción extra: “Tulkaapa äijät!”, grabada durante las sesiones del Kivenkantaja y que cuenta con la colaboración de los hermanos Lejon y los de Thyrane. Se trata de una melodía popular fiestera, en plan Korpiklaani, recuperada por el dúo sueco Nordman bajo el título de “Kom un gubbar”; Ville tradujo la letra de esa versión al finlandés y está interpretada de manera totalmente desenfadada. No deja de ser curioso, porque la letra habla de un funeral y está puesta en boca del muerto; al parecer, antiguamente los funerales por aquellas latitudes eran tremendos fiestorros. Huelga decir que las dos ediciones de Plasmatica se convirtieron entonces en rarezas.
El 6 de septiembre de 2003 anunciaron que habían firmado un nuevo contrato con Spikefarm para otros dos discos. Lo primero que hicieron fue ponerse enseguida a preparar la reedición del Suden uni, ya que por fin habían conseguido que Plasmatica le cediera los derechos a Spikefarm. Ese otoño se lo mandaron a Mika Jussila para que lo remasterizara (más bien para que lo masterizara por primera vez; vid. capítulo 2.1), le diseñaron un libreto totalmente nuevo con la portada diferente (bastante más fea, en mi opinión; el dibujo es de Niklas Sundin, guitarrista de Dark Tranquillity y diseñador gráfico profesional) y traducciones de las letras, se hicieron unas foticos promocionales nuevas, recopilaron sus dos videoclips y cuatro canciones en directo de su actuación de Tuska 2003 en un DVD y el 8 de diciembre lo pusieron a la venta. Vi alguna crítica en la que el redactor se quejaba de que se reeditara un disco que tenía sólo dos años; obviamente, el que dijo eso no conocía la historieta de los problemas con Plasmatica. La verdad es que la mejora en la producción de las canciones es notable. Del festival de Tuska, las cuatro canciones incluidas son todas las que tocaron menos una; la que falta es “Raunioilla”, cuya calidad de sonido no consideraron suficiente para publicarla. (De todos modos, esa canción en concreto salió en un reportaje sobre el festival, emitido por el canal finlandés YLE; si alguno de vosotros tiene una versión en calidad decente de ese material, ¡que haga el favor de ponerse en contacto conmigo!) Además, al CD le añadieron una canción extra: “Tulkaapa äijät!”, grabada durante las sesiones del Kivenkantaja y que cuenta con la colaboración de los hermanos Lejon y los de Thyrane. Se trata de una melodía popular fiestera, en plan Korpiklaani, recuperada por el dúo sueco Nordman bajo el título de “Kom un gubbar”; Ville tradujo la letra de esa versión al finlandés y está interpretada de manera totalmente desenfadada. No deja de ser curioso, porque la letra habla de un funeral y está puesta en boca del muerto; al parecer, antiguamente los funerales por aquellas latitudes eran tremendos fiestorros. Huelga decir que las dos ediciones de Plasmatica se convirtieron entonces en rarezas.